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En lo que representa uno de los avances más trascendentes en la lucha contra las adicciones, la Secretaría de Salud (SSA) acordó con la industria tabacalera del país eliminar, a partir de enero de 2003, la publicidad de cigarrillos en radio, televisión e Internet.
Con motivo del Día Mundial sin Fumar, celebrado el pasado 31 de mayo, la SSA, dio a conocer que las tabacaleras se comprometieron a incluir, en 25 por ciento de la superficie de la cara posterior de las cajetillas, advertencias sobre los riesgos para la salud que existen por consumir su producto, así como a restringir la publicidad exterior, en espectaculares y la promoción de eventos deportivos y artísticos a partir de 2003.
México, sin renunciar al ejercicio legítimo de la autoridad, sobre la base de la negociación y no de la confrontación, exigió a la industria tabacalera adoptar en nuestra nación la misma conducta que en los países donde se ubican sus casas matrices.
No podemos aceptar que la vida de los mexicanos valga menos que la de los ciudadanos estadounidenses o británicos, aseguraron las autoridades sanitarias.

Invertir en salud contribuye a combatir la pobreza y asegurar la protección de los derechos humanos, por ello México trabaja para estrechar los vínculos entre salud, desarrollo económico y seguridad global, aseguró el doctor Julio Frenk Mora, titular de la SSA, quien felicitó a la directora general de la Organización Mundial de la Salud, Gro Harlem Brundtland, por su liderazgo. En su intervención ante la 55 Asamblea de la OMS, con la representación de México, informó sobre la creación de la Comisión Nacional de Macroeconomía y Salud, en respuesta a los tres grandes retos del sistema de salud mexicano: equidad, cali-dad y protección financiera. En Ginebra, sede de la OMS, México se pronunció por movilizar los recursos necesarios para reducir las muertes prema-turas y la discapacidad, lo cual representa no sólo un imperativo ético, sino una de las inversiones más redituables. "En nuestro turbulento mundo, donde abundan las excusas para subrayar las diferencias entre naciones, etnias o reli-giones, la salud permanece como uno de los pocos valores realmente universales. Después de todo, en los fenómenos de la salud en el nacimiento, el sufrimiento, la recuperación y eventualmente la muerte todos encontramos nuestra humanidad común", finalizó el doctor Frenk Mora.		En lo que representa uno de los avances más trascendentes en la lucha contra las adicciones, la Secretaría de Salud (SSA) acordó con la industria tabacalera del país eliminar, a partir de enero de 2003, la publicidad de cigarrillos en radio, televisión e Internet. Con motivo del Día Mundial sin Fumar, celebrado el pasado 31 de mayo, la SSA, dio a conocer que las tabacaleras se comprometieron a incluir, en 25 por ciento de la superficie de la cara posterior de las cajetillas, advertencias sobre los riesgos para la salud que existen por consumir su producto, así como a restringir la publicidad exterior, en espectaculares y la promoción de eventos deportivos y artísticos a partir de 2003. México, sin renunciar al ejercicio legítimo de la autoridad, sobre la base de la negociación y no de la confrontación, exigió a la industria tabacalera adoptar en nuestra nación la misma conducta que en los países donde se ubican sus casas matrices. No podemos aceptar que la vida de los mexicanos valga menos que la de los ciudadanos estadounidenses o británicos, aseguraron las autoridades sanitarias.


		México presentó la Agenda de la Salud Infantil en el Nuevo Milenio ante la Asamblea General de las Naciones Unidas Por un Mundo Mejor para los Niños, efectuada en Nueva York en mayo. Entre las metas cumplidas están la eliminación de la poliomielitis paralizante y de la letalidad por sarampión, como lo planteó el Presidente Vicente Fox, al asignar desde el inicio de su gobierno la prioridad a los temas de la salud infantil. En el caso del sarampión se logró en 2001 una meta histórica, pues es la primera vez, después de tener literalmente millones de niños que murieron a lo largo de los años en las epidemias de dicho mal, en que tenemos un año sin un solo caso. Esta decisión del gobierno nos permitirá cumplir, cuatro años antes de lo previsto, con los compromisos asumidos en la ONU para el 2010 en materia de salud infantil.