La muestra de la delegación Cuauhtémoc, consistió de 23 escuelas, 11 de nivel secundaria y 12 de educación media superior, teniendo un total de 734 estudiantes encuestados. 

RESULTADOS CUAUHTÉMOC

CARACTERÍSTICAS SOCIODEMOGRÁFICAS.

De los 734 estudiantes encuestados en la delegación Cuahutémoc, el 41% pertenece al sexo masculino y el 58% al sexo femenino. Congruente con la distribución de los estudiantes por grupos de edad, la mayoría de la muestra se ubica en los grupos más jovenes, 30% tiene 14 años o menos, y 75% de los estudiantes son menores de 18 años. El 38% de la muestra se ubica en el nivel de secundaria, 50% en el nivel preparatoria y un 13% en escuelas técnicas. Cinco de cada 100 estudiantes encuestados había dejado los estudios el año anterior a la encuesta y ocho de cada 100, trabajó tiempo completo durante ese mismo período.

PREVALENCIA DE CONSUMO DE DROGAS: TABACO Y BEBIDAS ALCOHÓLICAS.

El tabaco y las bebidas alcohólicas son las sustancias mas consumidas por los estudiantes encuestados, a pesar de que para el 75% de ellos, se trata de sustancias que legalmente no pueden comprar o consumir en establecimientos en que se expenden estos productos.

Tabaco. El 51.23% de los estudiantes encuestados ha fumado tabaco alguna vez, este porcentaje es más elevado que el observado en el promedio general de los estudiantes entrevistados en todo el Distrito Federal (48.29%) (gráfica 1)

Los índices de uso son superiores entre los varones que entre las mujeres (55.73% y 37.23% respectivamente) (gráfica 2).

El consumo se incrementa paulatinamente con la edad, el 24% de los estudiantes de 13 años reportó haber fumado, esta conducta se observó en el 68% de los jóvenes de 17 y 18 años. Observandose un pequeño decremento en los índices de consumo al alcanzar la mayoría de edad (61%).

Los porcentajes mas altos se ubican en los bachilleratos (65%), seguido de las escuelas técnicas y las secundarias (38% y 37% respectivamente) (gráfica 3).

El consumo es más importante entre aquellos estudiantes que abandonaron sus estudios el año previo a la encuesta o no fueron estudiantes de tiempo completo y entre aquellos que habían trabajado (gráfica 4)

Bebidas alcohólicas. El 75% de los estudiantes entrevistados en esta delegación han consumido bebidas alcohólicas en alguna ocasión, el 68% lo hizo en el último año y el 32% las consumió en el mes anterior al estudio. Estos datos reflejan un consumo superior en los tres tipos de prevalencias para la delegación Cuahutémoc, que los observados en la media del Distrito Federal (73.86%, 64.83% y 24.05%) (gráfica 5).

Existen diferencias importantes por género, el 85% de los varones en contraste con el 68% de las mujeres, han consumido alguna vez en su vida estas substancias. Las diferencias son más marcadas cuando solamente se considera el consumo actual (durante los 30 días previos a que contestaran el cuestionario), con una proporción de 2 varones por cada mujer, lo.cual se puede apreciar en la gráfica 6.

Los índices de experimentación se incrementan conforme aumenta la edad. El 63% de los estudiantes menores de 13 años reportaron haber ingerido bebidas alcohólicas, esto ocurrió en el 88% de los que habían alcanzado la mayoría de edad. El consumo durante el mes previo al estudio fue 4 veces superior entre los mayores de 16 años (43.07%) que entre los de menor edad (9.39%)

Los índices más importantes de consumo en el último mes se observan en los bachilleratos (46%), seguidos por las escuelas técnicas y secundarias ( ambas con un 20%) (gráfica 7).

Igual que en el caso del tabaco, el haber dejado los estudios el año previo y el haber trabajado se constituyen como factores de riesgo para el consumo.

Se observaron índices importantes de abuso, ya que el 2.6% de los estudiantes encuestados reportaron consumir cinco copas o mas por ocasión de consumo, una ó dos veces por semana, 13% reporto hacerlo una vez por mes (gráfica 8). Las bebidas de preferencia de estos adolescentes son los "cócteles" o "coolers" y la cerveza, seguidos por los destilados (gráfica 9).

PREVALENCIA DEL CONSUMO DE OTRAS DROGAS.

Los estudiantes entrevistados en esta delegación han experimentado más frecuentemente con la mariguana (5.72%) y la cocaína (4.639%). La tercera droga de preferencia son los solventes inhalables (2.35%), seguida por los alucinógenos (1.63%), y el crack (0.95%). Cuando se considera únicamente el consumo en el último mes, la cocaína (1.63%), y la mariguana (1.46%) ocupan el primer lugar . Es importante recalcar que el uso de la mayoría de las drogas es superior en la delegación Cuahutémoc que en el promedio obtenido en todo el Distrito Federal (gráfica 10).

Los índices de experimentación son más importantes entre los varones, con diferencias más marcadas que las observadas en el caso del tabaco o de las bebidas alcohólicas. Cuatro hombres por cada mujer han probado la mariguana y cuatro por cada una, la cocaína.

Los índices de consumo muestran un marcado aumento conforme incrementa la edad de los usuarios, por ejemplo, solamente 1.52% de los menores de 16 años reportó haber probado la mariguana pero esto ocurrió en 9.16% de los mayores, la cocaína mostró un comportamiento similar con 2.12% y 6.68% respectivamente (gráfica 11)

VARIABLES ASOCIADAS AL CONSUMO

Percepción de las consecuencias del consumo en la escuela. Se preguntó a los estudiantes qué hacía el maestro si el estudiante llegaba intoxicado. De acuerdo con los alumnos, la respuesta mas frecuente del maestro es tratar de ayudarlo aconsejándolo (21.39%) o llamar a sus padres (20.71%); sigue el enviarlo a la dirección (19%) o la expulsión (14%); una proporción pequeña (1.3%) consideró que el maestro no hacía nada.

Tolerancia Social hacia el consumo de Sustancias. En general la tolerancia social hacia el consumo es baja, aproximademente el dos por ciento de los estudiantes de la delegación Cuahutémoc respondió que sus compañeros verían bien si usara, aunque fuera solamente 1 o dos veces, sustancias tales como la mariguana, la cocaína, los inhalables, la heroína o las anfetaminas. Hay poca variación por tipo de sustancia, ya que más de las dos terceras partes de los estudiantes entrevistados respondieron que su uso sería una conducta mal vista.

La mayor tolerancia se observó para el consumo de bebidas alcohólicas, 6% consideró que sus amigos verían bien si tomara 1 ó 2 copas una o dos veces a la semana, pero el 40% consideró que lo verían muy mal. El fumar una o mas cajetillas por día o el tomar alcohol todos los días fue relativamente más tolerado que probar otras sustancias (55% y 72%, respectivamente dieron la opción "lo verían muy mal"). Cuando se pregunta a los estudiantes sobre consumo frecuente de grandes cantidades (4 ó 5 copas todos los días), los índices de tolerancia son bajos, similares a los observados en el caso de las sustancias ilegales (gráfica 12)

Percepción del Riesgo asociado con el Consumo. A diferencia de lo que se observa cuando se investiga la tolerancia social hacia el consumo que es en general baja, así se trate de experimentación, uso regular o de diferentes tipos de sustancias, los estudiantes muestran variaciones importantes en su percepción de riesgo de experimentar o usar frecuentemente, diferentes drogas. Más de una tercera parte de los estudiantes consideró muy peligroso experimentar con sustancias 1 ó 2 veces y aproximadamente dos terceras partes, hacerlo regularmente. El orden que ocuparon las sustancias, en cuanto a la percepción de riesgo, de menor a mayor fue: mariguna, anfetaminas, inhalables, cocaína, y heroína (gráfica 13).

La percepción de riesgo asociada con el consumo de tabaco y alcohol es muy baja; el 53% de los estudiantes reportaron que era muy peligroso fumar 1 ó mas cajetillas de cigarros al día, solamente 13% consideró peligroso beber 1 ó 2 copas de alcohol 1 ó 2 veces por semana. Ahora bien, cuando se trata de beber todos los días o de tomar frecuentemente grandes cantidades de alcohol la percepción de riesgo se acerca a la reportada para las otras drogas. (80% y 68% respectivamente)

Contacto con Usuarios. Como era de esperarse, los estudiantes están más en contacto con usuarios de tabaco (86%) y alcohol (77%) que con usuarios de otras drogas si bien una proporción importante respondió tener amigos que usaban mariguana (25%), tranquilizantes (21%), inhalables (12%), cocaína (12.5%), anfetaminas , (7.22%), crack (5.5%) y heroína (5.7%).

Necesidades de Información. En general, los estudiantes de esta delegación opinaron que la información que dan los medios de comunicación sobre el medio ambiente es mejor que la recibida a través de la escuela (82% y 71% respectivamente), lo contrario se observa para la información dada sobre el manejo de la sexualidad (51% y 64%) y drogas (51% y 54%).

Una tercera parte de la población opina tener una información muy amplia sobre drogas, sexualidad y medio ambiente; más de la mitad cuenta con datos suficientes, y solo el 11% no tiene información sobre estos temas. Sin embargo, los estudiantes reportan que necesitan tener más información sobre todo de sexualidad, drogas y medio ambiente (gráfica 14) y que les gustaría obtenerla a través de la escuela o bien en cursos y conferencias.

 

CONCLUSIONES CUAUHTÉMOC

Los resultados de la evaluación de 1993 confirman la tendencia observada en estudios anteriores en lo que se refiere al elevado índice de abuso de tabaco y bebidas alcohólicas en la población estudiantil. Un índice elevado consume grandes cantidades de alcohol semanalmente, práctica que se asocia con el consumo de cerveza y de bebidas conocidas como "cócteles" y "coolers".

La delegación de Cuauhtémoc se caracteriza por su elevado índice de experimentación con tabaco (59%) y alcohol (85%) en la población masculina, superior al promedio de la ciudad capital (56% y 78% respectivamente); sucediendo lo mismo entre las estudiantes de sexo femenino, ya que presentaron índices de experimentación de tabaco (47%) y de consumo actual de alcohol (24% vs 17%) superiores.

Los estudiantes menores de 14 años consumen menos tabaco (24% vs 31%) y alcohol (64% vs 66%).

La prevalencia de consumo experimental de mariguana (5.7% vs 3.5%); de cocaína (4.6% vs 1.6%); y de alucinógenos (1.6% vs 0.82%); es superior al promedio, tienen mas amigos que consumen mariguana, tranquilizantes y cocaína y una baja percepción de riesgo asociado a su consumo.

Como se puede observar, el consumo de alcohol y tabaco entre los estudiantes de esta delegación es elevado, pareciera ser que el consumo de estas substancias es una práctica normal, que no se ve afectada por las leyes que restrigen la venta de estas substancias a los menores de 18 años. Por otro lado, éstas son las substancias que más número de amigos consumen, que presentan los índices más bajos de percepción de riesgo y los más elevados de tolerancia social.

Lo expuesto anteriormente nos pone de manifiesto, la necesidad de implementar programas preventivos tanto a nivel primario, para evitar que más estudiantes empiezan a consumir estas substancias, como a nivel secundario para impedir que el abuso de tabaco y alcohol aumente de manera alarmante dentro de esta población.

Después del tabaco y alcohol, las drogas más consumidas por los estudiantes de esta delegación son los inhalables y la mariguana; siendo los inhalables más comunmente utilizados entre los jóvenes de menor edad, y la mariguana entre los más grandes.

Los índices de tolerancia social son bajos, lo cual nos indica que en general, el consumo de drogas no es aceptado, y esto puede funcionar como un fuerte factor de protección para el uso de drogas. Desafortunadamente, los índices de percepción de riesgo, también presentan índices bajos, señalando que los estudiantes no perciben con gran peligro el utilizar substancias psicoactivas.

En las respuestas de los estudiantes a las preguntas de opinión, se percibe que tienden a pensar que la calidad de la información que reciben a través de los medios de comunicación o de la escuela es similar. Sin embargo, hubo una preferencia de los estudiantes por señalar que la escuela es el medio preferido para recibirla.

También hay una tendencia a dar credibilidad a la información impartida por cursos y conferencias, y solo una proporción menor manifestó preferir a los medios de comunicación masiva (Televisión, radio, revistas, etc.) como informantes.

El sentir de los estudiantes es que la drogadicción es un problema importante en la comunidad escolar, y que la falta de información, particularmente en el área de la sexualidad, es origen de muchos problemas. En este mismo orden de ideas, una proporción importante de estudiantes señaló la necesidad de recibir información referente al cuidado del medio ambiente.

En general, se observa una tendencia a demandar mayor calidad y cantidad de información. Se puede inferir que si se trabaja en el mejoramiento de los servicios ofrecidos por la escuela en materia de educación preventiva, seguramente se alcanzarán buenos resultados ya que existe la disposición y la necesidad del estudiantado de participar en su desarrollo pleno.

Finalmente, los resultados de la encuesta nos indican, que si bien existen esfuerzos para informar y combatir problemas propios de la juventud, estas medidas tienen que coordinarse y responder con mayor precisión a las necesidades reales de los estudiantes.